Sé
que nunca he tenido el valor para ir a buscarte, sabiendo que si
fuera podría escuchar de tu boca un “¿por qué has tardado
tanto?” Creo que a veces contra el amor lo más sabio es beber
insecticida cuando se empiezan a sentir mariposas en el estómago,
evitaría bastantes problemas. Quizás nunca he ido a buscarte porque
no quiero que me digas "te echo de
menos", quiero que me digas "estoy en la puerta, salte".
Pero a pesar de todo pienso, “joder, qué buen insomnio si me
desvelará sobre tu cuerpo” y a la mierda con la autodestrucción...
porque creo que no hay nada mejor que los besos robados en los
portales, perfectos, fugaces y eso sólo quiero que me lo des tú.
Porque eres distinto, porque esperas encontrar cisnes en las piscinas
municipales, porque cuando me conociste lo primero que me preguntaste
fue que si alguna vez había ido a las nubes y eso es algo que no me
había preguntado nunca nadie. Ahora es cuando lo entiendo. Vivo allí
desde que te conocí.
Escrito por María González Torres.
Me ha gustado mucho el texto, y quería comentarte, solo que no puedo quedarme con una sola parte de él. Simplemente me encanta.
ResponderEliminar